El viceconsejero de Aguas del Gobierno de Canarias, Marcos Lorenzo, ha estado presente esta mañana en el acto de firma de inicio de obras del proyecto para implementar una nueva red de saneamiento en la zona central del núcleo de Guargacho, en el municipio de San Miguel de Abona (Tenerife), que supone la inversión de 4,5 millones de euros en dicha red y que permitirá, además, renovar todos los servicios, “incluyendo la red de abastecimiento, eliminando pérdidas de agua fruto de instalaciones que habían quedado obsoletas”, ha indicado Lorenzo.
Marcos Lorenzo, que estaba acompañado por el alcalde de San Miguel, Arturo González, y la directora general de Aguas, Mónica Gómez Curiel, ha explicado que los trabajos se desarrollarán en un plazo de 20 meses, hasta principios de 2026, y que permitirán implementar dichas mejoras en las calles Benito Pérez Galdós, Camilo José Cela, Hermanos Álvarez Quintero, Ángel Guimerá, Antonio Machado, Cervantes, Rafael Alberti y Rosalía de Castro, todas en la zona centro de Guargacho. Serán ejecutadas por la empresa TRAGSA.
Este proyecto, que cuenta con financiación procedente de fondos europeos y que impulsa la Unidad del Ciclo del Agua de los fondos Next Generation que dirige Fernando Azcárate, además de suponer la instalación por separado de sendas redes de saneamiento y de recogida de agua de lluvia, incluye las acometidas y conexiones a las redes comarcales para mitigar la situación en este sentido de aquellos núcleos de población de menos de 5.000 habitantes que no cumplen en la actualidad con la directiva europea de aguas residuales.
Lorenzo ha manifestado que uno de los objetivos de este Gobierno “ha sido desde el primer momento impulsar el desarrollo de los proyectos relacionados con fondos Next Generation, que apenas tenían ejecución hasta el verano pasado, cuando entramos en el Ejecutivo, y que supondrán la gestión de 24,6 millones de euros en obras hidráulicas hasta agosto de 2026”. Además, “los tres proyectos de saneamiento que están previstos en Tenerife y los dos de depuración en la isla de La Gomera servirán para poner remedio a sendos expedientes europeos que podrían acabar con sanción para las Islas”.
La obra que se ha iniciado hoy supondrá una mejora, además de para el saneamiento, el abastecimiento y la recogida de agua de lluvia, para otros servicios en mal estado y que quedarán restituidos, como las canalizaciones eléctricas o la red de alumbrado público.
Cabe recordar que, además de este proyecto, en los próximos meses darán comienzo el de mejora de saneamiento en Chío (Guía de Isora) y en Tamaimo (Santiago del Teide), ambos en Tenerife, que supondrán una inversión total (junto al iniciado hoy) de 14,3 millones de euros, de los que 11,6 corresponden a fondos Next Generation y 2,8 corren a cargo del Gobierno de Canarias. Estos dos últimos se encuentran adjudicados a la empresa pública Gesplan.
Dentro de la misma partida procedente de fondos europeos, están en licitación la construcción de una nueva depuradora en Alajeró, así como la ampliación de la actual planta de depuración en Valle Gran Rey, ambas en La Gomera, con un presupuesto total de 6,2 millones de euros.
Cabe destacar que están en trámite además, procedentes de los citados Next Generation, la inversión de 5,7 millones de euros para reducir pérdidas en las redes de abastecimiento de municipios de menos de 15.000 habitantes; una subvención para actuaciones que reduzcan el riesgo de inundaciones, dirigidas a proyectos en la isla de Gran Canaria; otra dirigida al Cabildo de El Hierro para implantar un sistema de telegestión en la red, por importe de 1,9 millones; y otra partida de 4,5 destinada a implantar en toda Canarias un sistema digitalizado de control de los datos relacionados con el ciclo integral del agua, que dará como resultado un futuro observatorio autonómico del agua.
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