El consejero de Transición Ecológica y Energía, Mariano H. Zapata, presenta junto al General Jefe del Mando Aéreo de Canarias, Francisco Javier Vidal Fernández, la nueva planta solar fotovoltaica instalada en la Base Aérea de Gando, destinada al autoconsumo y al almacenamiento mediante baterías en la propia base.
El proyecto cuenta con una inversión total de 2.971.114,5 de euros, de los cuales 1,7 millones provienen de una subvención del Gobierno de Canarias y el resto de financiación del Ejército. Dicha subvención corre a cargo de los fondos europeos Next Generation.
El consejero de Transición Ecológica, Mariano H. Zapata, ha destacado la importancia de esta nueva planta, como una muestra del compromiso de Canarias con la sostenibilidad y la transición energética. "Este proyecto es un ejemplo de cómo la colaboración interinstitucional puede dar lugar a soluciones concretas y sostenibles en el marco de la transición energética” apuntó. “Con esta planta no solo reducimos las emisiones de CO₂ asociadas al consumo eléctrico”, sino que “también garantizamos el suministro de energía 100% renovable en una instalación clave para la Defensa."
Asimismo, sobre esta planta compuesta por 1848 paneles solares y una capacidad de 1,18 MW, destacó además la importancia de que cuente con almacenamiento energético. "El almacenamiento energético es clave para el éxito de la transición ecológica. Esta planta no solo genera energía limpia, sino que también optimiza su uso, permitiendo un suministro continuo las 24 horas del día, con sus 40 baterías destinadas a este fin con una capacidad de almacenamiento de 1.720 kWh".
Por su parte, el General Jefe del Mando Aéreo de Canarias, Francisco Javier Vidal Fernández, destacó el compromiso histórico del Ejército del Aire con el estricto cumplimiento de los protocolos medioambientales, con la certificación ISO 14001 lograda desde el año 2000 y puso en valor este proyecto, conocido como programa `Base Aérea Conectada, Sostenible e Inteligente´ (BACSI) en el que dicha base es proyecto piloto. “Esta planta producirá una media anual estimada de 2 MWh, lo que representa un tercio del consumo eléctrico total de la Base Aérea”, apuntó.
Seguridad operativa y sostenibilidad ambiental
La planta está formada por 1.848 paneles solares y un conjunto de 40 baterías, lo que asegura la producción y almacenamiento de energía en momentos de baja demanda.
En este sentido, la planta incorpora un sistema de anti-vertido y almacenamiento que maximiza la eficiencia y asegura que toda la energía generada sea aprovechada para el autoconsumo de la Base, incluso durante la noche. Una infraestructura pionera que demuestra el liderazgo de Canarias en proyectos sostenibles.
Otra característica destacada del proyecto es el uso del software especializado SGHAT (The Solar Glare Hazard Analysis Tool), que calcula la orientación e inclinación de los paneles para garantizar la máxima eficiencia sin afectar a las operaciones aéreas ni a la visibilidad de la torre de control. Este diseño permite que las operaciones de despegue y aterrizaje se realicen con total seguridad, respetando los estándares ambientales y operativos del Ejército del Aire.
Esta planta solar fotovoltaica, construida por la empresa ASCH Infraestructuras, representa un paso significativo en la descarbonización de las instalaciones militares y marca un precedente para futuros proyectos de colaboración en energías renovables.
ACFI PRESS Laura Campo