La consejera de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias, Candelaria Delgado ha mantenido hoy una reunión con la consejera de Bienestar Juventud y Reto Demográfico del Gobierno vasco, Nerea Melgosa, y su equipo, en el que ambas han puesto en común diferentes programas de apoyo a la población infantil y juvenil, además de repasar los principales hitos de la acogida de menores migrantes no acompañados.
Candelaria Delgado insistió en que “se abordaron temas en los que ambas comunidades tenemos competencia y en los que nos podemos ayudar para solucionar problemas e iniciar los trámites para compartir o colaborar en nuevas tecnologías, IA o domótica”. Asimismo, señaló que esto se hace extensivo a los procedimientos en los que ambas comunidades son referencia con el fin de avanzar en la mejora de los servicios sociales.
Con todo ello, apuntó, se pretende que colaboración iniciada por el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, y el lehendakari, Imanol Pradales, se vea reflejada en las áreas de servicios sociales, estando previsto que se mantengan futuras reuniones de coordinación.
Por su parte, Nerea Melgosa, incidió en la importancia de que ambas comunidades trabajen en colaboración y coordinación en retos comunes. Señaló que “hay soluciones encima de la mesa y añadió que comunidades como Canarias y Euskadi se enfrentan muchas veces solas a esos retos”. Por ello, hizo un llamamiento al Estado para que acometa las responsabilidades y competencias para asumir esos retos. En este sentido, puso de manifiesto “la disposición de ambas comunidades para trabajar y buscar el bien común de todos y todas”.
La reunión de las responsables del área de Bienestar Social de las dos comunidades se enmarca dentro la visita de una delegación del Gobierno vasco, encabezada por el lehendakari, Imanol Pradales, a Canarias con el fin de abordar diferentes aspectos de interés común con el fin de generar sinergias y compartir experiencias.
Ambas representantes, además de abordar los aspectos dirigidos a la mejora de la atención de los menores migrantes no acompañados, hicieron referencia a diferentes proyectos sociales, dirigidos a la atención a los colectivos más desfavorecidos.
Melgosa compartió algunos de los programas que se desarrollan en Euskadi, como Aukerak Suspertzen, dirigido a niñas, niños y adolescentes en situación de desventaja social, que cursan estudios de educación primaria o secundaria, y con el que se apuesta por darles apoyo educativo extraescolar y reducir la brecha digital social.
La representante vasca incidió en el desarrollo de dicha acción a través de personas voluntarias y profesionales, mediante la activación del tejido comunitario local, que, a través de una red de entidades del tercer sector repartidas por toda la geografía de Euskadi, permite llegar a entornos altamente vulnerables, además de garantizar el acceso de los menores a dicho servicio.
Por otro lado, se puso sobre la mesa la experiencia piloto Barnahaus ya iniciada en Euskadi, centrada en la atención integral frente a la violencia sexual contra la infancia y la adolescencia, que está previsto que se ponga en marcha el próximo otoño en Álava.
Surgida como consecuencia del incremento de las denuncias por delitos sexuales con víctimas menores de edad, esta iniciativa pone el acento en ofrecer una atención homogénea y coordinada que integre los sistemas sanitario, educativo, social, policial y judicial. Con ello, se pretende concentrar en un espacio de referencia la intervención de los diferentes profesionales y de los servicios prestados a las víctimas para garantizar una atención ordenada, coordinada y especializada, reducir la victimización secundaria.
ACFI PRESS Giovanni Pérez